jueves, 3 de febrero de 2011

Dulce Sabor de la Pasión.

Ella cantaba una melancólica canción con su dulce voz, se podía decir que esa voz tenia cierto parecido a la de las sirenas cantando, encantaba a todo aquel que las escuchara cayendo en un profundo hechizo. La leve brisa de aquel jardín balanceaba su morena melena.
Él la miraba a lo lejos, no podía hacer nada mas, no podía acercarse a ella, algo se lo impedía, ¿Que le pasaba? Nunca creyó en el amor a primera vista, entonces.. ¿Por que su corazón latía tan fuerte?¿Por que le sudaban las manos?¿Por que se sentía tan patético?, La belleza de esa joven muchacha, cantando aquella preciosa canción sin duda habían enamorado al Joven de ojos oscuros que por mera casualidad pasaba por allí. Sin duda el tampoco creía en el destino, y sin dudarlo se dio la vuelta y se marcho..El chico, tras varios días sin quitarse a la joven de la cabeza, decidió volver por aquel hermoso paraíso en pleno centro de la ciudad, y sin obtener suerte, ya que ella no estaba, pero sin darse cuenta, iba día tras día esperando volver a ver semejante belleza, de largo cabello moreno y piel clara. Sin esperanza alguna se dio por vencido, y cuando se disponía a marcharse... Volvía a escuchar una dulce melodía, mucho mas alegre que la anterior, Iba corriendo hacia la voz, de nuevo con esperanzas de que a la vuelta de aquel árbol tan grande estuviera ella, tan bella.. y Allí estaba, sentada en un banco, con la cabeza agachada dibujando en un cuaderno. La tiene ahí delante de sus narices, y no decide acercarse a ella..¿Pero que diablos le pasaba por la mente? Ni el mismo lo sabia, lleno de timidez y confusión, volvía a darse la vuelta, cuando en ese momento, una voz en su mente le llamo cobarde, idiota, ¿Que mas da? por intentarlo, uno se busca su propia suerte, y si dejase pasar aquella estupenda oportunidad se acabaría arrepintiendo o al menos la conciencia le acabaria matando. Y decidido se dirigió hacia ella, y cuando ya estaba enfrente de ella, le dijo: "CREO QUE ERES LA MUJER DE MI VIDA". Ella sin dar crédito a lo que oía, sonrió, y así fue como comenzó, una historia diferente de Amor.

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